Toyota Aygo. La alegría de los placeres sencillos
La historia es divertida. La semana pasada hablaba por teléfono con un querido amigo que trabaja en Toyota. Como me lamentaba de que hacía tiempo que no tenía coche, me contestó «pues cómprate un Aygo» (sí, el tío es un corpo). Mi reacción inmediata fue «¿qué demonios quieres que haga con un Aygo? Para darle …